BASF en España ha presentado sus resultados económicos del ejercicio 2023. El Grupo logró unas ventas en España de 1.358 millones de euros, lo que significa un descenso del 13 % respecto a los 1.562 millones de 2022. Este descenso es el resultado del efecto negativo de los precios (-7 %), que el año anterior habían crecido significativamente, y de una demanda más débil (-6 %). Los resultados, en línea con las previsiones del sector, permiten observar cómo el Grupo ha sabido mantener la dinámica en el país, con un comportamiento más positivo que el que tuvieron en el mismo periodo las ventas de BASF a nivel global, dónde se situaron en un -21 % respecto al año anterior.
Carles Navarro, director general del Grupo en España: “el desarrollo de nuestras actividades muestra una alta competitividad y salud robusta, a pesar de la coyuntura económica y política actual. Si ponemos en contexto las cifras, estos resultados nos sitúan a niveles prepandémicos; comparados con ejercicio de 2019, estaríamos hablando de un 7% por encima”.
La realidad del mercado –baja demanda, aumento de costes lastrados principalmente por la energía, disponibilidad de stock–, no ha afectado sin embargo igual a todos los segmentos, ni tampoco lo han hecho de la misma forma durante el año. Se observa una evolución positiva de menos a más en volúmenes, especialmente en el segundo semestre en los negocios de los superabsorbentes, lubricantes, pinturas, cosmética y cuidado del hogar. En precios, todos los negocios muestran una clara tendencia a la baja a medida que avanza el año, a excepción de Soluciones Agrícolas, que además consigue superar la cifra de ventas.
Navarro se muestra optimista y destaca otro aspecto de la actividad del Grupo: “los niveles de inversión se mantienen estables. Ello pone sobre la mesa, por un lado, nuestra capacidad de resiliencia, compromiso, capacidad de innovación y fiabilidad; y la apuesta del Grupo por el país, por otra”.
Confianza en el proyecto del Grupo en España
BASF tiene previsto invertir en España en 2024 40 millones de euros y mantiene los niveles de los últimos años. En 2023 la inversión se situó finalmente en 45 millones de euros, frente a los 43 millones previstos. La mayor parte de este capital (14 millones) se destinaron en la finalización y puesta en marcha del Technology Center para el negocio de pinturas en Guadalajara, inaugurado el pasado mes de junio. “Con esta inversión finaliza la mayor inyección jamás recibida en este centro y que superó los 70 millones de euros. Si bien ya era un centro estratégico para la compañía, hemos observado como ha recibido nuevas líneas de fabricación que anteriormente se producían en otros enclaves europeos”. El negocio de Coatings forma parte desde el 1 de marzo de la entidad legal BASF Coatings Española, que opera bajo el paraguas del Grupo BASF.
Por su parte, los hubs digitales y de ingeniería, de proyección mundial y europeo respectivamente, continúan su evolución. El hub digital, por ejemplo, que opera bajo la empresa BASF Digital Solutions, cuenta con cerca de 600 personas que se trasladaron recientemente al nuevo enclave situado en Fuente de la Mora, Madrid.
En este sentido, la compañía también avanza en materia de diversidad e inclusión, en un sector fuertemente masculinizado, y con un reto importante de atracción del talento tanto químico como tecnológico. Actualmente, un 23 % de la plantilla son mujeres (frente a un 19 % en 2015). En 2023, el 44 % de las contrataciones en puestos técnicos y especialistas en España fueron mujeres. La presencia de mujeres en roles de liderazgo alcanza el 27 ‘4 % y en la Junta Directiva del Grupo en España llega hasta el 36%. El compromiso global de la organización es alcanzar el 30 % en 2030.
Alianzas para un futuro sostenible
BASF apuesta por las alianzas en un contexto de propósito conjunto para hacer frente a los retos de un futuro sostenible.
El pasado mes de enero, Inditex lanzó su primera pieza fabricada con loopamid®, una poliamida 6 (PA6, también conocida como nylon 6) fabricada 100 % a partir de residuos textiles, BASF ha proporcionado la primera solución circular para prendas de nylon fabricadas íntegramente a partir de residuos textiles: una chaqueta hecha 100 % de loopamid, siguiendo un enfoque de “diseño para el reciclaje”, todas las piezas, incluidos los tejidos, los botones, el relleno, los ganchos y bucles y las cremalleras. Debido a su capacidad para tolerar todas las mezclas de tejidos como PA6 y elastano, la tecnología de vanguardia detrás de loopamid permite el reciclaje textil a textil de residuos textiles postindustriales y posconsumo. Las fibras y los materiales se pueden reciclar en múltiples ciclos. Al mismo tiempo, las características del material son idénticas a las de la poliamida virgen convencional.
Navarro afirma: “apoyamos a la industria textil en su trayectoria hacia la sostenibilidad y ayudamos a que los consumidores puedan mejorar su propia huella ambiental, y queremos hacerlo en el corto, medio y largo plazo. Creemos en el compromiso a lo largo de toda la cadena de valor: desde nuestros proveedores, hasta ya no nuestro cliente, sino el cliente final de este”. Es por ello por lo que BASF colabora en iniciativas como el programa de capacitación impulsado por el Pacto Global de la ONU en la que participaron 300 empresas proveedoras del Grupo, o la alianza con la compañía energética Engie, que alimenta a ocho de nuestros centros con energía verde.
Las alianzas forman parte también de la apuesta firme del Grupo, a nivel global, por la electromovilidad. Por ejemplo, BASF inauguró el pasado junio en Schwarzheide, Alemania, la primera planta alemana de producción a gran escala de materiales catódicos para baterías y que podrá producir materiales para la parte catódica de las baterías de iones de litio de unos 400.000 coches eléctricos al año. Otro ejemplo en esta misma línea fue el anuncio del acuerdo como primer socio para brindar una solución de reciclaje para las baterías de iones de litio de los vehículos eléctricos del Grupo Iveco.