Durante el procesado del aguacate para la elaboración de alimentos derivados se produce un residuo que puede superar el 45 % del peso total del fruto. Para dar una segunda vida a estos residuos y alargar la duración del producto elaborado, Aimplas, Instituto Tecnológico del Plástico, desarrolla el proyecto Guacapack, liderado por la empresa ITC Packaging y en el que también participa el grupo de investigación de Análisis de Polímeros y Nanomateriales de la Universidad de Alicante (Nanobiopol-UA).
El objetivo del proyecto, que cuenta con financiación de la Agencia Valenciana de la Innovación (AVI), es desarrollar un nuevo sistema de envasado biodegradable y procedente de fuentes renovables que además alargue la vida útil del alimento en un 15 %, gracias a una etiqueta con función barrera al oxígeno, que evite su oxidación y mediante la incorporación de antioxidantes naturales extraídos del propio aguacate que permita reducir el uso de conservantes sintéticos.
Para conseguirlo, se va a extraer y purificar el almidón de la semilla de aguacate con el fin de obtener una película con la que se fabricarán etiquetas multicapa IML, que actuarán como barrera al oxígeno y evitarán la oxidación del alimento. Además, se obtendrán componentes activos de los residuos de la piel y la pulpa con alta capacidad antioxidante, que se incorporarán a un bioplástico (PLA) con el que se fabricará el envase por el proceso de inyección y que, al entrar en contacto con el alimento, alargará su vida en un 15 %.
Se trata de una alternativa al uso de aditivos sintéticos que, además, proporciona un nuevo uso de alto valor añadido a los residuos agroalimentarios, para obtener envases biodegradables y procedentes de fuentes renovables.