Tras su éxito con Envers y con Envers Glass, el primer frasco de vidrio airless con bolsa, Lumson lanza una nueva versión de Envers Glas, con una silueta renovada y más tamaños. El frasco se vuelve más estilizado y se ha añadido un formato de 40ml al de 50ml existente, ampliando así la gama de aplicaciones.
Envers Glas garantiza la máxima protección de la fórmula en el interior (gracias a la tecnología sin aire con una bolsa) y un alto rendimiento del producto, además de ser práctico de usar.
Como todos los productos airless de Lumson, Envers Glas también ha sido diseñado teniendo en cuenta el reciclaje y la recuperación: una vez que el producto se ha agotado, los componentes de vidrio y plástico se pueden separar y eliminar adecuadamente utilizando el método de reciclaje correcto.
Envers Glas se puede decorar tanto exterior como interiormente con tecnologías de impresión que van desde la serigrafía y el estampado en caliente hasta la metalización y el lacado interior, que delinean perfectamente los contornos de la botella y enfatizan el grosor, la profundidad y la belleza del vidrio.
Airless y vidrio
Se estima que el mercado mundial airless, valorado en 4.900 millones de dólares en 2020, alcanzará los 8.700 millones de dólares en 2032, con una tasa compuesta anual del 4,9 % (fuente: alliedmarketresearch ). Según The Packaging Company, la vida útil promedio de un producto se puede aumentar en un 15 % o más mediante el uso de un airless. Estos sistemas también minimizan el desperdicio sin comprometer la integridad de las fórmulas contenidas
En los últimos años ha habido un creciente interés en las alternativas al plástico y el vidrio es una de ellas. La necesidad de envases reutilizables y reciclables ha llevado al mercado a “redescubrir” el vidrio, uno de los materiales más antiguos (se inventó hace 4.000 años) y más versátiles: es resistente, reciclable y duradero en el tiempo, a la vez que elegante. Si el peso sigue siendo el mayor obstáculo para un mayor uso del vidrio, las investigaciones se han centrado en reducirlo para contener las emisiones de gases de efecto invernadero durante la producción, la eliminación e incluso durante la fase de reciclaje, y en el uso de vidrio posconsumo.