El Concurso de Diseño y Creación en Vidrio de Verallia ha premiado, en su octava edición, los diseños más originales, en una convocatoria conjunta entre España y Portugal, en la que han participado 171 alumnos de nueve escuelas (cinco españolas y cuatro portuguesas). El objetivo era crear un modelo de botella de vino estándar que pudiera ser usado por muchas bodegas.
De los 76 trabajos presentados al certamen, las propuestas más diferenciadoras y originales fueron Arco de Nata Vallés, alumna de la Escuela Universitaria de Diseño, Innovación y Tecnología (Esne) de Madrid, quien se ha alzado con el primer premio valorado en 2.500€. En segundo lugar, con 1.300 €, ha quedado el proyecto Arkhé de las alumnas Clara Vendrell y Nagore Celada de la Escuela Universitaria de Diseño e Ingeniería de Barcelona (Elisava). Y, por último, Guerni-k de los alumnos Antonio Riballo y Sofía Martín de Esne, quienes se han hecho con el tercer premio valorado en 900 €.
El jurado ha estado formado en esta edición por un total 17 personas entre las que han participado las bodegas Vicente Gandía, Mar de Frades, Grupo Freixenet, Vinhos Borges, Global Wines y Fita Preta como clientes de Verallia, la sommelier y comunicadora Meritxell Falgueras, el estudio de diseño especializado en packaging Maba y el equipo directivo de la vidriera.
Los premios
Arco es un envase inspirado en la arquitectura que representa la modernidad, la novedad y la actualidad pero sin perder sus orígenes en valores clásicos y tradicionales. Una botella sencilla cuyo sutil rebaje en la base le añade elegancia y modernidad. En su versión Premium incorpora a la base unas líneas grabadas, de altura irregular que dotan al envase de un plus de elegancia y dinamismo.Una botella para un vino que quiere atraer a personas jóvenes y modernas, de entre 30 y 50 años.
Arkhé se inspira en los terrenos volcánicos y áridos de El Hierro (Islas Canarias), lugar de gran tradición vinícola en los que las vides se aferran a la tierra retorciéndose sobre sí mismas
Guerni-k es un envase inspirado en el árbol de roble de la localidad vizcaína de Gernika. El diseño consiste en un corte diagonal en la base de la botella, que da lugar a un subnivel. Éste representaría la veta de la madera mientras que el nivel superior representaría la corteza del árbol.